
Estas personas que a diario vemos en la calle, algunos ya de la tercera edad, soportan las inclemencias del clima como el sol, el frío o la lluvia, por diez mil pesos diarios. Según Estupiñán, este tipo de Empresas, “se escudan en los grande distribuidores y distribuidores mayoristas”, con lo que se desentienden y no les importa el vendedor final.
“La idea no es quitarles el trabajo a ellos, ni restringir la venta del producto por que estamos haciendo estos videos, sino garantizarles un salario mínimo de verdad, y además visibilizar este problema que tiene la mayoría de los vendedores en Colombia”, dice Estupiñán.
En la campaña se proponen dos campos de acción. El primero de ellos se trata de un “carrusel de la solidaridad” en el que se le compran los productos a una hora específica del día, para que que el resto de la jornada descansen y les quede libre.
El segundo frente de acción es más ambicioso, se trata de impulsar una iniciativa legislativa para que les garanticen un salario mínimo con todos los temas legales que esto conlleva.
“Vamos a trabajar arduamente para visibilizar este problema para que el Congreso de la República demuestre que está del lado de los trabajadores”, puntualizó el reconocido empresario.
Estupiñán es abogado, especialista en derecho constitucional, doctor honoris causa en Educación del Derecho Internacional Humanitario y Derecho Internacional de los Derechos Humanos por logos International University. v
También tiene estudios en el área contable, empresarial, negocios, gerencia, finanzas, salud ocupacional, operacional y manejo de riesgos.
Además, tiene más de 15 reconocimientos entre ellos, el galardón Construyendo País, In recognition of your work in education and communication y reconocimiento al mejor gerente de centros comerciales a nivel nacional.